Somos mamás, papás, abuelos, abuelas y familiares injustamente obstruidos en el contacto y relación con nuestros afectos más queridos.
En un mundo en que la estructura familiar clásica tiende a desaparecer, donde las relaciones humanas se vuelven más efímeras y las personas cada vez más individualistas, los niños muchas veces sufren los vaivenes de los comportamientos negativos de sus progenitores luego de una separación. Las instituciones dedicadas a protegerlos no solo suelen dilatar y potenciar los conflictos, sino que parecen no tener las herramientas para solucionarlos o para sanar el daño que realizan.
Somos Agentes de Paz. Infancia compartida se propone como participe motivador de un cambio cultural, para concientizar con perspectiva de infancia sobre el daño que provoca el maltrato infantil, la vulneración de los afectos, los vínculos y la identidad. Nuestra búsqueda es siempre poniendo el foco en una niñez libre de maltratos.
Nos dedicamos a visibilizar este problema en nuestra sociedad, convocando al dialogo y la reflexión, formando profesionales y funcionarios, conteniendo a víctimas, buscando la modificación de legislaciones y políticas públicas para encontrar la solución a este flagelo que no distingue de géneros, lugar o clases sociales.
Los niños tienen derecho a un sano vínculo con mamá, papá y su familia extendida luego de una separación conyugal. Obstruir ese vinculo vulnera su derecho a la identidad, a una crianza sana, cariñosa, igualitaria, equitativa y libre de violencias.