Tras haberse separado, la pareja llevaba 14 años de litigio judicial por el cumplimiento del régimen de visitas
Una mujer deberá pagarle más de un millón de pesos a su ex pareja por haberle impedido que tuviera contacto con el hijo que ambos tienen en común. Se trata de un fallo inédito por el monto que se fijó para un caso de este tipo.
Según se detalla en el fallo, el vínculo de padre e hijo en los años en los cuales era necesario se vio obstruido, lo que ocasionó un daño consolidado en el tiempo y generó, según acreditó el hombre de 43 años oriundo de Buenos Aires, «una minusvalía psicológica parcial y permanente».
Los jueces Silvia Bermejo, Osvaldo Álvarez y Oscar Ameal de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil de Capital Federal resolvieron que la mujer indemnice con la suma de $555 mil por daño psíquico $500 mil por daño moral y $2.500 por gastos de farmacia y asistencia con una tasa de interés que deberá devengarse desde el 12 de diciembre de 2005, cuando inició la demanda por no respetar un régimen de contacto acordado en 2002, cuando el menor tenía dos años.
El hombre había recurrido a la Justicia diciendo que a partir de la ruptura ella le impidió tener contacto con el chico y en la demanda posterior denunció que la mujer no cumplía con lo acordado. La mujer, por su parte, también denunció incumplimiento del convenio y dijo que un día lo esperó hasta la hora pactada y cómo no apareció se retiró.
En 2006, él solicitó que se designe un asistente social y concurrió con ella a la casa de su hijo pero la mujer le negó que se lo llevara porque el chico estaba enfermo. Días después también se negó. En ese momento, el hombre hizo una denuncia ante una comisaría por agresiones de parte de la madre contra el hijo porque el menor le había dicho «mamá me pegó» y tenía la cara roja. Hubo una audiencia, pero no un acuerdo.
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En noviembre de 2007 se fijó un nuevo régimen y se determinó que debían reunirse en una hamburguesería de Quilmes con la asistente social y tampoco ocurrió. Luego se cambió la asistente y se puso otra fecha que la mujer obstaculizó diciendo que por la gripe A no podían ir a lugares cerrados con mucha gente y que por las temperaturas bajas tampoco correspondía hacerlo al aire libre.
En octubre de 2009 el hombre pidió que se suspenda el régimen en forma provisoria para poder viajar a Misiones por no tener trabajo permanente en Buenos Aires. En abril de 2010 se presentó en un lugar de encuentro pautado con la asistente social pero la mujer con el hijo no se presentó. Tampoco en la audiencia donde presentó un certificado médico. Hubo luego otra nueva fecha de encuentro donde la madre haber estado (presentó tickets para acreditarlo) y él no se presentó.
Finalmente el juez hizo saber que debía cumplirse el régimen acordado para no afectar el derecho de su hijo, el hombre pidió que el restablecimiento del vínculo se realice en el juzgado pero la madre también se negó.
De esta manera, aunque en principio se había condenado a la mujer demandada a pagar $120 mil, más los intereses el hombre no quedó conforme y pidió que se incrementen los montos en concepto de «daño psíquico, tratamiento psicológico, gastos de farmacia y asistencia y daño moral».
En el nuevo fallo quedó determinado que el hombre «presenta síndrome de ansiedad de origen reactivo», que está en un «extenso y frustrante conflicto» y sufre de «minusvalía psicológica» con un grado de incapacidad del 15%, con sustento en el diagnóstico de un síndrome depresivo ansioso, de grado moderado y crónico, de carácter irreversible. Así, el monto por daño psíquico subió a $555 mil.
Luego se sumaron los gastos de farmacia tras un peritaje médico y se pidió un incremento en cuanto al «daño moral», «considerando el daño que implica la falta de contacto con su hijo, como así la falta de armonía que provoca en su ánimo y equilibrio cotidiano la incapacidad acreditada». Además comenzarán a devengarse los intereses estipulados desde diciembre de 2005, cuando la madre del chico fue notificada del incumplimiento del régimen de visitas.